Apoyo al día de la mujer 2020
Se cumplen 110 años de la decisión de salir a la calle el 8 de marzo para conmemorar el día internacional de la mujer. Cada año, las mujeres de todo el mundo han salido a las calles el 8M para exigir una alternativa a este sistema que pone en peligro la vida vidas y nuestro planeta. Ya en 1910 algunas mujeres, entendieron que sólo estando juntas y luchando por resolver los problemas de las mujeres del mundo se puede conseguir transformarlo. Porque cada 8 de marzo nos vemos fuertes y juntas llenando las calles, como reflejo de ese feminismo en lucha constante que va haciéndonos avanzar como sociedad, empujando revoluciones y construyendo resistencias.
Desde cualquier lugar del planeta y como no en Corella, las mujeres luchamos por un mundo sin violencias machistas ni sexuales, contra la división sexual del trabajo y la mercantilización de nuestros cuerpos, por los derechos reproductivos y la libertad de las orientaciones sexuales e identidades/expresiones de género. El feminismo igual que el internacionalismo, cuya piedra angular es la solidaridad, el respeto y la justicia social, solo puede valer si es para todas y en todas partes.
Las mujeres no vamos a permitir que este mundo se siga precarizando a costa de las más vulnerables y que sigan explotando nuestras vidas y nuestros cuerpos. Ni que el odio, el racismo, el machismo, la xenofobia o la LGTBIfobia sean la respuesta de quienes están dirigiendo el planeta hacia la guerra, la desigualdad y el colapso. Defendemos el acceso a los recursos necesarios para cubrir nuestras necesidades en condiciones de igualdad y de sostenibilidad ambiental.
sabemos que no se puede transformar el mundo sino ponemos en el centro de las luchas a quienes estamos en el centro de la sociedad. La centralidad del mundo sólo puede cambiarse desde ese “todas juntas” y desde el entendimiento de que nuestros retos como mujeres son los mismos que tenemos como sociedad.
Este 8 de marzo de este 2020 volvemos a salir a la calle en Corella apoyando todas las actividades que se organicen, porque el enemigo es el mismo que hace 110 años, cuando en Copenhague un grupo de mujeres revolucionarias decidieron que debían salir todas juntas a reclamar el mundo. Porque el mundo es nuestro y vamos a cambiarlo.